La higiene es el conjunto de conocimientos y técnicas empleadas para el control de todos aquellos factores que ejercen efectos nocivos sobre la salud. El término se deriva del Higía, la diosa de la curación en la mitología griega.
Actualmente se puede distinguir entre la higiene personal (cuya aplicación es responsabilidad del propio individuo) y la higiene pública (que debe ser garantizada por el Estado).
La higiene y sus procedimientos relacionados cobraron importancia para los gobiernos a partir de la Revolución Industrial (siglo XVII), momento en que fue preciso sanear y desinfectar las fábricas debido a la abundancia de ratas, las cuales provocaban, a través de sus excrementos, graves enfermedades parasitarias, tales como teniasis o triquinosis.
Desde entonces, la higiene se ha convertido en parte vital, tanto del aseo personal, los lugares públicos y las viviendas, como de los centros sanitarios, donde seguir ciertas normas es fundamental para prevenir contratiempos en los enfermos hospitalizados. El objetivo básico de la higiene es mejor de salud, conservarla y prevenir enfermedades e infecciones.
Gracias a los experimentos de Luis Pasteur (1822-1895) que probaron la teoría germinal de las enfermedades infecciosas higiénicas cobraron suma importancia en las intervenciones médicas y en la vida diaria de la población como sinónimo de salud.
Dicha teoría propone que los microorganismos son la cause de una amplia gama de enfermedades, al invadir a los humanos y a los animales.
Tales gérmenes son llamados agentes patógenos, pueden ser de varios tipos; virus, bacterias, hongos o parásitos.
Con el paso del tiempo, el término higiene ha integrado a los métodos que los individuos emplean para estar limpios, por ejemplo, el uso de jabón, champú y agua; aunque también hace referencia a situaciones interpersonales como: hábitos de limpieza en lugares públicos, prevención de enfermedades contagiosas en el área médica y revisión de factores ambientales en el lugar de trabajo que provocan enfermedades, malestares, incomodidad e ineficacia laboral.
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